Tras las persistentes presiones del colectivo Ni Una Menos, el gabinete machista de Dalmiro Garay perdió a uno de sus miembros más cuidados. El gobernador radical “renunció” a Alejandro Jofré, acusado penalmente de cometer reiterados abusos sexuales. Con el subsecretario de Trabajo fuera de escena, Cornejo busca convencer al Senado de que su “independiente” ministro de Gobierno será un juez de la Corte “con perspectiva de género”.
A la sombra
Ya está, acá no ha pasado nada. El gobierno provincial busca que se olvide rápidamente que el Ministerio de Gobierno, Trabajo y Justicia fue durante seis meses el aguantadero de Alejandro Jofré, el subsecretario de Trabajo denunciado penalmente de cometer sistemáticos acosos sexuales contra mujeres bajo su relación de dependencia.
En medio de la avanzada de Alfredo Cornejo para alcanzar el sueño de la Corte adicta, la presencia del acusado en el gabinete de su candidato Dalmiro Garay comenzó a provocar un ruido insoportable para una porción importante de la sociedad, y de la clase política, que rechaza la violencia machista.
El primer chiste del gobierno fue presentar a Garay, ni más ni menos que el jefe de la cartera política de Cornejo, como un candidato “independiente”. La segunda humorada, mostrarlo como una suerte de “feminista menos pensado”. “Es más importante que haya perspectiva de género a que sea hombre o mujer”, dijo hace pocos días el gobernador que ya instaló al misógino Valerio en uno de los sillones del máximo tribunal.
Y dale con la coronita
Hasta ahora, la prolongada permanencia del acusado Jofré en Trabajo no provocó mayores costos políticos para el gobierno. Cornejo desoyó los reclamos de apartamiento formulados por la CGT y las dos CTA, organizaciones gremiales estatales, y dirigentes políticos de la oposición.
Por otra parte, el frente judicial tampoco generó inquietudes para el Ejecutivo. La fiscal Cecilia Bignert y la jueza Cristina Pietrasanta no les creyeron a las tres víctimas y, desde diciembre de 2017 a la fecha, desestimaron las pruebas para imputar al abogado y militante del PRO, y se negaron a brindar medidas de protección mínimas para las mujeres violentadas.
Sin embargo, Julieta Nacif, una de las abogadas de las denunciantes junto a Alfredo Guevara, confirmó ayer a EL OTRO que constan en el expediente judicial elementos concretos para avanzar en la investigación. “Un cuerpo colegiado de psicólogos y psiquiatras realizaron un informe que demuestra que las tres mujeres sostuvieron relatos coherentes, no hay contradicciones, no hay signos de fábulas, son hechos concretos, están situados, detallados, hay una manifestación y un reflejo de la angustia que padecieron por los abusos, y que todavía padecen por el hostigamiento laboral”, manifestó la letrada, quien este lunes presentó, por cuarta vez, un escrito pidiendo la imputación de Jofré, pero recibió, en forma sorpresiva y sin fundamentos, la notificación de la suspensión de una audiencia prevista para hoy.
La querellante confirmó a este medio que cualquier hijo de vecino ya estaría imputado con esas mismas pruebas. Evidentemente Jofré no lo es, aunque resulta difícil que la Justicia pueda mantener por mucho tiempo más el congelamiento de la causa, sin que alguna de las funcionarias judiciales arriesgue pagar el precio de un presunto incumplimiento de sus deberes.
Alerta
Con el reloj del expediente en marcha y la proximidad de la Audiencia Pública en el Senado, donde Garay deberá defender su postulación, Cornejo decidió no sobreexponer el talón de Aquiles del candidato y, tal como ya anticipó este diario, trasladar a Jofré a un puesto en el Poder Judicial.
“El gobierno de Cornejo mantiene y protege a funcionarios condenados y denunciados por violencia física, por violencia laboral, por acoso, como es el caso de Alejandro Jofré, subsecretario de Trabajo, acusado de abuso simple por tres trabajadoras del área”, denunció este lunes el colectivo Ni Una Menos durante la multitudinaria marcha que confluyó en la Casa de Gobierno. Setenta organizaciones feministas exigieron el apartamiento del funcionario y, en el marco del repudio de una “Justicia misógina y patriarcal”, rechazaron la postulación de Garay.
La persistencia de las mujeres que luchan empujó la decisión de Cornejo pero, la evidencia de la tosca estrategia del mandatario, de ningún modo logró confundirlas. Anoche, a pocos minutos de conocerse la “renuncia indeclinable”, Ni Una Menos difundió un comunicado en el que exigió, una vez más, el avance de la causa judicial, puso en duda el apartamiento de Jofré, insistió con el rechazo de Garay en la Corte, y denunció las “maniobras políticas” del gobernador.
Las feministas de Mendoza se declararon en alerta y movilización.
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