Este sábado 8 de diciembre, el trío polifuncional se presentará en un nuevo espacio cultural que abrirá sus puertas con canciones de Mailén Obrador. La cita es a las 22 en una dirección que se envía por privado.
Fotos: Cristian Martínez
Tres pasiones musicales se reunieron dos años y medio atrás y conformaron un conjunto que está a punto de lanzar su primer disco, cuyo título permanece como incógnita. Martín Morales, Emilio Jofré y Gonzalo Gorordo, son líberos, componen, arreglan y discuten el rumbo del proyecto que, generosamente, compartieron -mate incluido- con el equipo de EL OTRO.
¿Dónde se encontraron?
Emilio “Yoya” Jofré: Nos conocimos en la Facultad (de Artes y Diseño de UNCuyo). Los tres cursamos la carrera de Música Popular. No todos terminamos pero nos encontramos ahí, hace mucho. Nos tomó varios años reunirnos en este proyecto.
Martín Morales: Surgió medio inconscientemente, compartiéndonos las canciones. Acorde a lo que yo me acuerdo, y me pueden desmentir acá mismo, yo me sentía un poco mal por cuestiones amorosas y le escribí a él pidiéndole que me pasara una canción suya que me hacía bien.
Él me pidió una tonada y le dije que si quería se la enseñaba y la cantaba él, y me dijo que sí, surgió la idea de grabarla y, ya que estábamos, grabamos un video.
En medio de eso sentí la necesidad de hacerlo partícipe al “Yoya” de la grabación, porque en un cumpleaños mío me había dicho que le había gustado la canción.
Y ya después nos quedó gustando la huevada. Él tenía una zamba, nos la compartió, nos encantó y ya empezamos con esa.
Me acuerdo que estábamos comiendo en mi casa porque nos juntábamos a ver las canciones y él – Gorordo- dijo: “Tenemos que hacernos cargo de esto que está pasando”. Y se armó el noviazgo.
¿Cómo es ese trabajo que hacen con las canciones?
Emilio: La mayoría de los temas son del Gonza y del Flaco. Y es como proponer un tema, uno lo trae y casi siempre nos gusta.
Gonzalo Gorordo: Pasa a veces que lo escuchamos y vemos algo que puede ir por otro lado y le buscamos la vuelta, no porque el tema sea feo sino porque puede mejorar.
Emilio: A veces no cuadra un tema con el repertorio que tenemos porque viene de otro palo. Generalmente el Flaco, el Tincho, se encarga de hacer los arreglos.
Martín: Siempre sujetos a modificaciones porque una cosa es lo que tenés en la cabeza y otra lo que suena después. Se van afianzando cuando los vas tocando. Y son todas dinámicas que no son fijas.
Gonzalo: Aparte pasó que vos empezaste a componer después…
Emilio: Claro, yo empecé a componer bastante motivado por las juntadas del trío. Estos dos componen increíble y componen mucho. Yo no componía y eso me contagió, y ahora tocamos un tema mío.
¿Qué herramientas les brindó el estudio?
Emilio: Un montón. Todo lo que yo sé ha sido estudiando en el marco de la Facultad y fuera también. Lo que hizo en mí el estudio en la universidad fue ponerme en un ambiente que me permitió aprehender la música desde otros lugares. Pero además he aprendido mucho de los demás, de la guitarreada, de los amigos…
Gonzalo: A mí el estudio me dio, principalmente, herramientas de comprensión armónica. Yo siempre he sido baterista y, desde la batería nunca tuve la pulsión de componer. En cambio desde que agarré una guitarra y empecé a traspasar algunos conocimientos armónicos, recién ahí pude sentarme a darle forma a una canción, dar colores a esas cosas que intento decir.
También, como dice el Yoya, uno se siente empapado y sumergido en un ámbito de gente que siente la misma pasión y, a partir de ahí, surge también una proyección hacia el laburo de hacer música.
Martín: Muchos compañeros de la Facultad que entraron conmigo ya venían tocando hacía rato, eran músicos profesionales que iban a ponerle un título a lo que ya se dedicaban. En cambio, yo tocaba en mi pieza y si pasaba alguien cerca dejaba la guitarra por miedo.
A mí me ha aportado mucho en todos los aspectos de mi vida. La cuestión vincular es importante.
¿De qué trata Libra (nuevo espacio) y qué van a hacer ustedes?
Martín: Este lugar que se abre lo abrimos con mi novia. Es un espacio en el que funciona un centro de yoga, hay comedia musical y muchas otras actividades.
La idea era conjugar las inquietudes artísticas con una conciencia de alimentación distinta sin subestimar otras. Mi novia es vegana y pudo mostrarme un abanico de posibilidades bárbaro que es sano y rico, y la idea es compartir eso. Este sábado empezamos. El lugar tiene una capacidad de 30 personas, más o menos.
Gonzalo: Este sábado vamos a presentar lo que ya está siendo nuestro primer disco que tiene las canciones que venimos trabajando desde hace dos años y medio. Estamos en el proceso de la mezcla del disco que todavía no tiene el nombre definido.
Y vamos a compartir con la Mailén Obrador, que es una amiga nuestra de la misma época, de nuestra juventud estudiantil. Y más allá de que somos amigos y hemos compartido un montón, nos encanta verla porque ella tiene una presencia tan sutil y poética que es muy avasallante. Es tremenda.
Pedí la dirección aquí.
