Gisela fue vista por última vez en julio de 2015. En el Barrio La Favorita todavía la esperan sus tres hijos y su familia. Sin embargo, el Ministerio Público Fiscal no ha mostrado un solo avance relevante en la búsqueda de la mujer desaparecida. Familiares de Gutiérrez, junto a la Campaña contra las Violencias hacia las Mujeres Regional Mendoza, enviaron una nota al procurador Alejandro Gullé para exigir respuestas concretas. Denuncian impunidad y vulneración de derechos.

Video de archivo: GiraMundo TV / 27 de julio de 2018

La celeridad y trabajo del gobierno provincial y del Ministerio Público Fiscal para perseguir políticamente a militantes sociales de la organización barrial Túpac Amaru, o tratar de encarcelar a docentes del Normal Tomás Godoy Cruz por realizar una asamblea, no ha sido la misma que la aplicada a la búsqueda de Gisela Gutiérrez, desaparecida hace más de tres años.

A pesar del largo tiempo transcurrido, la investigación judicial no arrojó ninguna información precisa que permita dar con el paradero de la trabajadora y madre de tres niños, quien por entonces se encontraba embarazada de cuatro meses, ni acerca de las circunstancias de su desaparición.

Ramona Bazán reclama por su hija ante la comisión de Género y Erradicación de Trata de Personas, en junio de 2016. Foto de archivo: Legislatura de Mendoza

Una vez más, Ramona Bazán, madre de Gisela, se presentó el pasado 29 de noviembre en el Poder Judicial para exigir formalmente algo tan elemental como la verdad frente al terrible dolor de la interminable incertidumbre.

Ramona y parte de su familia, acompañados por representantes de la Campaña contra las Violencias hacia las Mujeres Regional Mendoza presentaron una nota formal dirigida al Procurador General del Ministerio Público Fiscal, Alejandro Gullé,  en la que dieron cuenta de “información y denuncia de vulneraciones a los derechos humanos en la investigación de la desaparición de Gisela” y solicitaron una reunión con el funcionario judicial.

“Desde hace 3 años, julio de 2015, desconocemos dónde está Gisela, qué pasó con ella, y hasta el momento la Justicia mendocina no solo no ha brindado ni un solo dato certero acerca de lo que pueda haber sucedido, sino que además con su inacción ha revictimizado a toda su familia”, señalaron desde la Campaña.

De acuerdo con esta organización, no se trata de un caso aislado “sino que por el contrario resulta paradigmático de las posibilidades-dificultades de las instituciones estatales encargadas de prevenir, sancionar y erradicar la violencia contra las mujeres en sus diferentes formas y manifestaciones, ante las desapariciones de mujeres en democracia en nuestra provincia.”

Foto de archivo: Coco Yañez

La familia de Gutiérrez y la Campaña señalaron una serie de irregularidades en la investigación que explican la falta de respuesta en este gravísimo caso, y que se repite, en otros tantos, donde la pertenencia social y de clase de las mujeres pobres se configura en un estigma para las instituciones policial y judicial responsables de la búsqueda.

Se “registran investigaciones inconsistentes y falta de respuestas concretas que garanticen la seguridad y el acceso a la justicia de las mujeres en situación de violencia”, denunció la Campaña y enumeró algunas graves falencias: “Entre otras irregularidades señalamos demoras en la toma de declaración testimonial a las personas que la habrían visto por última vez e irregularidades en los rastrillajes, los cuales no se realizaron con personal y recursos necesarios para conseguir datos relevantes a la causa”.

De acuerdo con el compromiso asumido por la Procuración General, el fiscal adjunto Gonzalo Nazar recibirá a los familiares de Gisela este miércoles a las 10.30.

 

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