La agrupación Frente Índigo abandonó la conducción del sindicato que lidera Sebastián Henríquez, tras denunciar impunidad de dirigentes acusados de abuso sexual y violencia de género, además de privilegios y sobresueldos sindicales y negociados con el gobierno de Cornejo. Desde el SUTE aclararon que el presunto abusador renunció a la conducción, aunque reconocieron que otro sospechado de agresiones machistas todavía forma parte de la dirigencia del gremio.

Por Negro Nasif

Carolina Defilippi, la dirigenta que renunció a la Prosecretaría de Investigación, Sistematización y Estadística del SUTE. Foto de archivo: PSTU

Con un extenso documento difundido este lunes (leer aquí), el Frente Índigo comunicó su alejamiento de la conducción del Sindicato Unido de Trabajadores de la Educación (SUTE).

Desde esta agrupación interna acusaron al Frente de Unidad por la Recuperación del SUTE (FURS), que actualmente conduce uno de los sindicatos más importantes de Mendoza, de abandonar los principios fundamentales que lo llevaron a derrotar a la Lista Celeste en las elecciones de 2017.

Al centro: Sebastián Henríquez, secretario general del SUTE. Foto de archivo: Coco Yañez

Entre los argumentos de la fractura en el frente de izquierda que gobierna el SUTE, la fracción disidente puntualizó graves denuncias, que van desde abusos sexuales de menores y violencia de género por parte de dirigentes del FURS, hasta el sostenimiento de privilegios económicos entre los miembros del secretariado que conduce Sebastián Henríquez, pasando por negociados con el gobierno de Alfredo Cornejo.

Textuales del documento

Foto de archivo: Coco Yañez

Luego de un año de haber sido denunciado un miembro del Secretariado provincial del SUTE (Agrupación Marrón) por violencia de género en la Junta de Disciplina de nuestro sindicato, por otra integrante de la Comisión Directiva (Agrupación Verde), la investigación del caso aún no ha avanzado hacia su resolución. Quienes han tenido mayoría en dicha Junta (Agrupación Marrón) hasta hace pocos meses, cuando el caso se hizo público, lejos de haber contribuido al esclarecimiento del mismo, han aprovechado la condición de mayoría en este órgano para encubrirlo.

A este caso se suma otra denuncia de gravedad. Ésta por abuso sexual de un miembro de la Comisión revisora de cuentas del SUTE (Agrupación Marrón) hacia un menor de su entorno familiar. Frente a nuestro planteo de hacer pública la resolución, tomada por mayoría en el Secretariado, de pedirle la renuncia al mismo, no tuvimos respuesta por parte del resto de las agrupaciones que lo integran.

Negociados con Cornejo

Foto: Coco Yañez

En ocasión de la disputa salarial 2019, las fuerzas mayoritarias del FURS (Marrón, Verde y Bordó -PTS-) militaron la aceptación de la propuesta del gobierno, en una mesa paritaria adelantada por el mismo para evitar conflictos durante el periodo electoral. La adaptación a los tiempos electorales del gobierno, con el cierre de la paritaria en diciembre de 2018, fue un obstáculo para garantizar una amplia participación de la base en los plenarios.

En absoluta minoría, debatimos, tanto hacia el interior del secretariado como públicamente, acerca de la necesidad de rechazar el pacto de ajuste al que nos sometía dicho acuerdo. Este “arreglo” que se militó como una conquista salarial, demostró en los hechos que no lo fue. No sólo porque no fue una recomposición salarial que permitiera “empatarle” a la inflación, sino que, al no ser logrado a través de la lucha, tampoco pudo ser defendido por el conjunto de los trabajadores cuando el gobierno anunció su eliminación definitiva al pasar las elecciones.

Privilegios y sobresueldos

Foto de archivo: Cristian Martínez

Uno de los primeros avances en el combate contra la burocratización, impulsado por la conducción del FURS en su primer año de mandato, fue la de incluir en su línea gremial la eliminación de los plus salariales percibidos por los dirigentes sindicales durante la conducción Celeste.

Sin embargo, ante el incumplimiento por parte de los miembros de la Agrupación Verde (PCR; PTP en el Frente de Todos), que integran cargos en las juntas calificadoras y de disciplina docente, referido a aportar el dinero de sus sobresueldos al fondo de lucha del sindicato, las restantes fuerzas se negaron a darle el mismo tratamiento. Y frente a nuestro llamado a las mismas a tener un posicionamiento público como Secretariado ante este hecho, todas las agrupaciones (Marrón, Verde, Bordo y Rosa- PO-) decidieron ocultarlo.

Del mismo modo, consideramos que la decisión de un amplio sector del Secretariado a pagarse el Ítem Aula (que es descontado a las licencias gremiales) con fondos del sindicato, sin ponerlo a consideración de la base, fue en contra de este principio.

“Una campaña de difamación”

Foto de archivo: Cristian Martínez

La conducción del SUTE respondió a última hora de esta tarde mediante un comunicado en el que se consideró objeto de “una campaña de difamación a través de medios afines a la interna sindical”.

La respuesta oficial se centró en refutar cualquier tipo de sospecha acerca del posible encubrimiento del sindicato de una grave situación de abuso sexual por parte de uno de sus dirigentes, tal como denunciaron sus exaliados del FURS. “Aclaramos que esta situación fue tratada en el Secretariado la misma semana que nos enteramos de dicha denuncia” y que “se solicitó y se hizo efectiva la renuncia de la persona denunciada con la mayor celeridad posible”, manifestaron a la vez que precisaron: “para proteger a quien denuncia y por su pedido expreso no comunicamos esto”.

Fuente: SUTE Carta documento de renuncia enviada el 3 de junio de 2020.

Si bien el comunicado destacó el compromiso del SUTE con “la perspectiva de género como parte de la política sindical”, no aclaró el cuestionado rol de la conducción frente al otro caso de violencia machista denunciado por el Frente Índigo, en el que estaría implicado un referente del oficialismo.

EL OTRO consultó telefónicamente al secretario de Comunicación y Prensa del Sute, Emilio Perez Lacon. El dirigente, quien calificó a las denuncias públicas como “pronunciamientos políticos hacia la conducción de una persona (por Carolina Defilippi) que se va”, confirmó que actualmente la Junta de Disciplina sigue un proceso de investigación de otro miembro del Secretariado acusado de violencia de género pero que todavía no ha sido apartado de sus funciones.

Foto de archivo: Coco Yañez

“Hay distintas denuncias, hay un proceso de investigación, pero sigue estando en la conducción del sindicato porque es una denuncia que hay que corroborarla primero, eso va a Junta de Disciplina. Es una denuncia no una condena, que hay que corroborar todavía. Él mismo pidió dejar el espacio que compartían (con la denunciante), para que la compañera no se sienta mal, y se fue a otra sede a trabajar”, explicó Perez Lacon.

 

 


 

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