La obra de teatro “La persistencia de los grillos” tendrá funciones en el centro cultural Ana Frank los viernes 15 y 22 de febrero. EL OTRO entrevistó a Diego Nogara y Tania Casciani, parte de un completo team teatral que promete ayudar a reflexionar a cambio de abandonar la comodidad del status quo.

Fotos: Seba Heras

Ósjar Navarro Correa se planteó en algún momento de su vida la posibilidad de narrar historias desde Mendoza en base a una “trilogía suburbana mendocina” de obras teatrales: “Pajarito”, “Destacamento” y “La persistencia de los grillos”, que es la que aquí abordamos, pero la segunda obra en la trilogía en cuestión.

“La persistencia” reúne a una familia en un patio de Colonia Segovia en el que Carolina (Diego Nogara) y Rosa (Lorena Pereyra) comparten una(s) noche(s), con Jordán (Jorge Fornés), de profunda tensión entre el pasado y el presente de cada quien y sus devenires y responsabilidades, mientras organizan la fiesta de cumpleaños de “Johana”, la sobrina que no está.

La identidad de género, las elecciones y los abusos sexuales, las posibilidades de ser en una sociedad que empieza a cuestionarse sus maneras. Todas cuestiones que, de forma dramática, se abordarán sin concesiones.

La obra no se estrena aquí en estos días.

Diego Nogara: La obra se estrenó cinco años atrás en Buenos Aires, también con la dirección de Ósjar y también conmigo en el papel de Carolina. Han pasado un montón de cosas en estos últimos años y se ha reformulado en partes.

Mi personaje ya no es el mismo. La obra está atravesada por temáticas que están en agenda, que estamos discutiendo y que estamos debatiendo y, de algún modo, van tomando significancias distintas.

¿Hay dos asistentas de dirección?

Tania Casciani: Sí, en parte porque Ósjar viaja mucho es que tomamos la responsabilidad junto a Estefanía Ferraro de asistirlo para acompañar el proceso cuando está pero también cuando no está. También nos vamos rotando algunas otras tareas técnicas.

Somos un equipo bastante grande, más allá de que en el escenario hay tres personas actuando. Está la escenógrafa, iluminadora, productora, el diseño sonoro… Todo confluye en una puesta relacionada a la mímesis del realismo que plantea Ósjar como concepto que fue llevado a la actuación, en la forma que tenemos de hablar y en la forma en que se desarrolla cierta marginalidad.

El lenguaje, lo discursivo, lo sonoro, los colores, todo el trabajo es bastante fino.

Diego: Y, más allá de que en el teatro suele haber una jerarquía respecto del director, Tania, Estefanía y Ósjar, funcionaron como un equipo, e incluso eso se ve también respecto del trabajo de escenografía y diseño sonoro, que estuvo resaltado en las devoluciones del Festival de estrenos.

Cada uno en lo suyo pero trabajando en un equipo que funciona armónicamente.

La llegada de tu personaje no es tan armónica…

Diego: Sí, la llegada de Carolina, que es una chica trans, a la casa de su hermana Rosa, mientras se planea el cumpleaños de una niña de tres o cuatro años no es muy armónica. Porque viene a echar luz sobre cuestiones que no se hablan, viene a romper con…

Tania: (Interrumpe) El status quo…

Diego: Ahí arranca el conflicto que toca, como decíamos, temáticas muy actuales.

¿Cómo ha transitado tu personaje estos últimos años, siendo ella quien que carga con el peso de ser diferente?

Diego: La Carolina de cinco años atrás tenía una necesidad de indagar en lo femenino, en la mujer, quizá como un personaje que podría ser televisivo como Florencia de la V, muy mujer. Esta Carolina de hoy se identifica más “trava”, trans…

Tania: Se identifica más con lo trans porque no tiene una identidad definida como masculina o femenina sino que tiene su propia identidad trans.

Diego: Como decía Lohana Berkins, que hace poquito se cumplieron tres años de su muerte, esa “furia travesti” que reivindica lo trans. No soy mujer ni soy hombre, rompo esa cuestión binaria, soy trans. Esa es la lectura que yo hago.

Foto: Leandro Fernández

Van a estar el 15 y el 22 en el Ana Frank…

Tania: Sí, a las 22 horas. Está bueno hacer reservas porque dada la puesta en escena, la capacidad de la sala es reducida en pos de la apuesta intimista que deja al público casi dentro de la escena.

¿Cómo se trabaja con alguien como Jorge Fornés?

Diego: Jorge tiene 75 años y no parece que los tuviera. Es un compañero que pone el límite pero siempre lo pone mucho más allá de lo que esperarías y nos asombra. Él tiene situaciones de piso muy intensas y siempre dice: “Hagámoslo, hagámoslo!”.

Tania: Tiene una entrega y un compromiso envidiable.

Diego: Desde el momento en que empezamos a hacer la primera lectura se ve el oficio del actor y en él un montón, porque muchas veces uno necesita hacer un par de lecturas para entrar a ver a ese personaje. En él se ve de inmediato que sabe a dónde va.

FICHA:

La persistencia de los grillos
No es un viaje sencillo pero sí es digno de ser vivido

Viernes 15 y 22 de febrero, 22 hs.
Sala Ana Frank
Maipú 230, Ciudad de Mendoza

Reservas: 0261 430-5687

Intérpretes: Diego Nogara, Lorena Pereyra y Jorge Fornés
Diseño y realización escenográfica: María Eleonora Sánchez
Diseño lumínico: María Vilchez Aruani
Operación de luces: Paloma Barrera
Diseño sonoro: José Binetti
Diseño gráfico: Marcelo Sosa
Fotografía: Leandro Fernández
Vestuario: Casciani, Ferraro, Navarro
Realización de máquina: Juan José Cáceres
Asistente de escenario: Yair Cáceres
Asistencia de dirección: Tania Casciani, Estefanía Ferraro Petignano
Producción: Laura Beningazza, Ósjar Navarro Correa
Dramaturgia y Dirección: Ósjar Navarro Correa