El proceso penal por abuso sexual contra el jugador de fútbol de Independiente Rivadavia tendrá una instancia clave este miércoles. La Justicia deberá resolver si eleva la causa con las pruebas que ya obran en el expediente, o si continúa con pericias que podrían revictimizar a una niña que hoy tiene 5 años. La organización XUMEK presentó un escrito en el que considera que los “testimonios obtenidos en el proceso son autosuficientes” y que existe “un relato claro de abuso”. Resta saber cuál será la postura que asumirá el cuestionado fiscal Gustavo Stroppiana.

Por Redacción EL OTRO

Foto: Seba Heras

Este miércoles se desarrollará una audiencia clave en la causa penal contra Ignacio Irañeta, acusado de “abuso sexual gravemente ultrajante” de su sobrina, una niña de 3 años que narró a su madre hechos aberrantes, los que posteriormente fueron detallados en pericias judiciales.

El 29 de enero de 2019, el jugador del club Independiente Rivadavia de Mendoza fue imputado por un gravísimo delito que prevé una pena de 4 a 10 años de cárcel. Tras estar prófugo durante casi un mes, con pedido de captura nacional e internacional, la Justicia dispuso su libertad bajo fianza -fijada en $500 mil- y le impuso restricciones, entre ellas la imposibilidad de salir de la provincia. Limitación que trasgredió el año pasado cuando realizó un viaje a Santiago del Estero para hacer banco en un partido de fútbol, sin que esto haya motivado la reconsideración de su situación judicial.

Captura de pantalla de un título de Ovación, de Diario UNO | 14 de marzo de 2019.

Durante todo este tiempo Irañeta continuó con su vida profesional y pública sin mayores sobresaltos, bajo el amparo de sectores de la prensa hegemónica vinculados a La Lepra que resaltaron su figura en varias oportunidades. La campaña destinada a lavar su imagen fue documentada por EL OTRO y duramente cuestionada por organizaciones feministas que integran Ni Una Menos Mendoza.

Pese a la protección que le brindan las autoridades del club, quienes renovaron el contrato del jugador y actúan como si nada hubiese pasado, y no obstante los mimos que le dispensan sectores del poder económico y político, el expediente judicial ya acumula suficientes pruebas para llevar al acusado al banquillo.

Fiscal bajo la lupa

Fiscal Gustavo Stroppiana | Foto: Unidiversidad

Entre los distintos elementos que incriminarían a Irañeta se encuentra el testimonio de la víctima que comprende un relato claro, preciso y sin contradicciones. “Las testimoniales ya se terminaron y está todo el resto de la prueba, como cámara Gesell, entrevista preliminar y horas de juego, donde obviamente la situación de abuso ha quedado comprobada”, señalaron desde la querella.

Sin embargo aún persiste una controversia en torno a la última sesión de Cámara Gesell, la que debió ser oportunamente interrumpida para proteger a la niña. Según fuentes judiciales consultadas por este diario, en esta instancia será determinante el posicionamiento del fiscal de la causa, Gustavo Stroppiana, quien podrá solicitar la elevación a juicio en base a los elementos disponibles, o pedir que se complete la Cámara Gesell, aunque esa opción podría acarrear la revictimización de la menor, sometida una vez más a esa pericia.

Foto: Seba Heras

Tal como ya informó EL OTRO, pesan fuertes cuestionamientos sobre Stroppiana en otras causas de abusos sexuales en las que ha intervenido (leer aquí), lo que pone bajo la lupa la postura que asumirá este funcionario del Ministerio Público dependiente del procurador Alejandro Gullé, quien justamente no se ha destacado por la independencia republicana y la indispensable perspectiva de género que exige la legislación nacional e internacional.

“Un relato claro de abuso”

Lucas Lecour | Foto: Coco Yañez

El pasado 30 de noviembre el abogado Lucas Lecour, en representación de la Asociación para la Promoción y Protección de los Derechos Humanos XUMEK, se presentó en carácter de Amicus Curiae ante la Fiscalía Nº 14 de Delitos contra la Integridad Sexual, a cargo de Stroppiana.

De acuerdo con esta organización, la figura Amigos del Tribunal, reconocida en los procesos judiciales mendocinos, tiene por fin “aportar criterios que entendemos deben ser tenidos en cuenta al momento de tratar casos en los cuales niñxs y adolescentes son víctimas o testigos de abusos sexuales, y servir de orientación a profesionales, funcionarios y auxiliares de la justicia que abordan la problemática”.

Foto: Seba Heras

En el escrito de Lecour (leer completo aquí), tras detallar extensamente diversos fundamentos jurídicos, el presidente de XUMEK concluyó “que durante la etapa de investigación se llevaron adelante los medios de prueba necesarios para la obtención de un testimonio, el cual resulta ser suficientemente preciso para la corta edad de la niña”.

El letrado consideró que en todos los exámenes y entrevistas realizados a la víctima, incluida la declaración testimonial en Cámara Gesell, se llegó siempre el mismo resultado: “un relato claro de abuso”. “Los testimonios obtenidos en el proceso son autosuficientes conforme los criterios expuestos por la doctrina y jurisprudencia citada. Independientemente de la realización o no de posteriores pericias, es de suma importancia tener en cuenta ante cualquier acción evitar la revictimización de la niña, otorgando primacía a su interés superior, con el debido respeto al derecho de defensa y acceso a la justicia”, sostuvo Lecour.

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