A diez años del fallecimiento de Néstor Kirchner, el Estado argentino instalará en el CCK la escultura que el presidente ecuatoriano, Lenin Moreno, retiró de la sede de la Unasur. Compartimos fotografías inéditas de nuestro reportero gráfico Coco Yañez, tomadas en abril de 2016 en la ciudad de Quito, cuando la figura de bronce del primer secretario general del organismo sudamericano aún permanecía en su lugar de homenaje.

Por Redacción EL OTRO | Fotos: Coco Yañez

Este martes, una caravana de las “mil flores”, instalaciones en Tecnópolis, y mappings y posters en balcones y ventanas, conformarán el contexto de reconocimiento oficial y popular al expresidente Néstor Kirchner, quien falleciera en Santa Cruz el 27 de octubre de 2010.

Durante el mediodía, el presidente Alberto Fernández descubrirá en el interior del Centro Cultural Kichner (CCK) la escultura en homenaje al expresidente realizada por el artista porteño Miguel Gerónimo Villalba. Obra que el gobierno de nuestro país donó en 2014 a la Unión de las Naciones Sudamericanas (Unasur), cuya sede se encuentra en la capital de Ecuador, y que fue retirada en 2019 por decisión unilateral del presidente Lenin Moreno, tras la desarticulación del organismo.

Néstor Kirchner fue el primer secretario general de la Unasur, organización de integración regional conformada por doce países sudamericanos que impulsaron políticas comunes en infraestructura, salud, energía y defensa, además de cumplir un rol muy importante en el mantenimiento de la democracia y la paz regional. Como fue el caso de la exitosa medicación que el propio Kirchner realizó en mayo de 2010 para evitar la escalada de conflicto entre Venezuela y Colombia que puso a ambos países al borde de la guerra.

Con el alineamiento de los gobiernos de derecha a la política regional estadounidense, Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Paraguay y Perú promovieron en los últimos años el completo vaciamiento de las funciones de la Unasur y, en ese marco, el mandatario de Ecuador con el respaldo explícito del entonces presidente Mauricio Macri intentaron borrar la memoria simbólica del popular dirigente peronista, retirando la escultura que desde hoy permanecerá en el CCK.

En una carta abierta publicada ayer en sus redes sociales, la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner agradeció “a todos y cada uno de los argentinos y las argentinas, las muestras de reconocimiento, cariño y amor hacia quien fuera mi compañero de vida”, y reconoció especialmente a Alberto Fernández por la “decisión de repatriar la figura de bronce de Néstor que alguna vez emplazamos en la sede de la Unasur en Quito, allí en la exacta mitad del mundo, como la de su nuevo emplazamiento en el hall del Centro Cultural Kirchner”.

“Sinceramente, es una caricia al alma”, cerró Cristina.

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