La semana pasada EL OTRO reveló que la Secretaría de Cultura ya gastó una “caja chica” de más de $1,5 millones. Documentación oficial demuestra que Alejandro “Canito” Frías, funcionario y amigo de Diego Gareca, dispuso de $191.500 que no rindió.
En 1 junio de 2017 el secretario de Cultura, Diego Gareca, firmó la Resolución N° 1680, mediante la cual asignó fondos de libre disponibilidad a sus funcionarios políticos.
Señala el artículo 2 de esta norma: “Autorícese la asignación de ‘Caja Chica’ a los responsables que se detallan en Anexo, que forma parte integrante de la presente resolución, en donde además se consignan áreas y/o direcciones y hasta un monto máximo sugeridos, el cual será otorgado en la medida que se cuente con disponibilidad presupuestaria”.
En el citado Anexo se enumeran 20 funcionarios con topes para gastar. Entre ellos se encuentra Alejandro Frías, experiodista de MDZ y responsable de Ediciones Culturales de Mendoza, a quien se le asignó hasta $5.000 para consumos menores.
Sin embargo, de acuerdo con documentación oficial que una fuente reservada del Ministerio de Hacienda puso a disposición de EL OTRO, “Canito” Frías recibió en los primeros cinco meses de 2018 una suma muy por encima del tope fijado en la resolución firmada por su jefe. Y, como si no fuese suficiente, incumplió los plazos previsto por la ley para la rendición de los anticipos que gastó.
Anotalo en el agua
“Se observa que a la fecha del presente informe existen varios anticipos que no han sido rendidos por los comisionados”, señaló el Tribunal de Cuentas en el “Informe de Auditoría In Situ y Contable” que realizó el 25 de junio de este año sobre el presupuesto de la Secretaría de Cultura.
En el escrito el Tribunal precisó que esta situación irregular ya fue observada y explicada a los responsables en dos oportunidades y que, no obstante estos llamados de atención, “se han vuelto a entregar anticipos a comisionados que aún no han rendido los anteriores”.
Entre los principales deudores de comprobantes se encuentra Frías, quien recibió ocho anticipos de fondos, por un total de $191.500, no rendidos.
Según el requerimiento del Tribunal de Cuentas, se desconoce en qué gastó Frías $55.000 que Gareca le autorizó en enero, $70.000 de abril y $66.500 de mayo.
EL OTRO accedió a informes contables que arrojan algunas pistas sobre los consumos de “Canito” en ejercicio de la función pública. Un volante de imputación del Sistema de Información Contable (SIDICO) enumera 14 ítems de gastos del funcionario durante uno de sus viajes a Cuba.
Bajo la asignación “Anticipo para gastos e imprevistos que demande la participación en la Feria Internacional del Libro en La Habana”, Frías contó el 29 de enero con una “caja chica”, paralela al presupuesto oficial de su cartera, de $55.000. Parte de ese dinero fue consumido en comidas de trabajo, servicio de internet, inscripciones a congresos y alquiler de sillas y mesas.
Cuando rinda el resto de sus gastos pendientes, la comunidad de la cultura mendocina tal vez pueda saber qué hizo “Canito” Frías con casi $200 mil en tan solo cinco meses.
