EL OTRO presenta este espacio donde fotógrafes cuentan en primera persona la historia de algunas de sus fotos favoritas. Aquello que sintieron al tomarlas, lo que representan o lo que quisieron transmitir. Toda foto tiene autxr y toda foto tiene historia.
Hoy: Liliana Salas
Estas fotografías fueron realizadas en 2017. Siempre sentí que quería abordar esta temática y más en una provincia tan conservadora como Mendoza.
Así que le pedí a mi amiga y modelo, Mariposa Posa, si deseaba ser parte y aceptó. El contexto fue en la intimidad y me comentó que no las publicaría, hasta ayer que me mandó un mensaje diciendo que estaba lista.
Al verlo me emocioné, no solo por las fotos sino porque ella, la protagonista, se empoderó, se dio cuenta de que su momento era ahora porque fue realizando un proceso personal que yo buscaba retratar con la cámara.
Mariposa aceptó su libertad, su fuerza, su lucha, su templo.
También su vulnerabilidad. En definitiva su transmutación.
Y sí, era hoy el momento justo, tanto para ella como para mí. No solo se liberó sino que también me liberó, me empoderó.
Al romperse mi corazón
mi tórax se abrió en dos
de allí nacieron plumas
y por eso vuelo, amor.
¿Cómo vuelan las pájaras?
Sabiéndose libres, sintiéndose inmensas
siendo propias, íntimas, singulares.
Los pájaros en mi cabeza se fueron
porque me hecho pájara.
Hice un nido en un rincón,
guardo libros y semillas.
Y allí vivo conmigo.
Soy mía, amor.
Y eso se siente viento, cielo celeste y sol.
Mariposa Posa
