Ante el aumento salarial por decreto y el “empoderamiento” otorgado para liderar a las comunidades educativas en la aplicación de los protocolos para el regreso de las clases presenciales, un numeroso grupo de autoridades escolares le solicitará al gobierno una recomposición salarial “justa”.

Por Redacción EL OTRO 
Fotos: Inicio de Ciclo Lectivo 2021 | Gobierno de Mendoza

“El valor del trabajo de los equipos directivos es enorme. Agradecemos la confianza que ha depositado en nosotros durante su gestión, particularmente en tiempos de pandemia. Asimismo, la responsabilidad es cada vez mayor y, lamentablemente, esto no se refleja en nuestras condiciones laborales, ni salariales”, aseguran directoras y vicedirectoras de distintas escuelas de la provincia de Mendoza en una carta que estiman enviar al director general de escuelas, José Thomas, y que hasta ayer había sumado unas 350 adhesiones.

En reacción al aumento decretado por el gobernador Rodolfo Suarez consistente en un 20% en tres tramos y un bono anual no remunerativo ni bonificable de 54 mil pesos, que achata la pirámide salarial, en la misiva solicitan un “reconocimiento de la labor y recomposición salarial a los equipos directivos de las escuelas de Mendoza”. Para despejar sospechas sobre el origen de la iniciativa, aclaran hacerlo “fuera de cualquier bandera política o sindical”.

En concreto, sin formalidad paritaria alguna, piden un aumento del escalafón de jerarquía directiva, fundamentando que “un docente con la máxima carga horaria y antigüedad gana lo mismo que un director, y el nivel de responsabilidad es muy distinto”.

Por otro lado, bajo la proclama “nuestro salario no es ganancia” y  errando groseramente al destinatario, solicitan que se revisen “los desproporcionados descuentos que se nos aplican por Impuesto a las Ganancias”, ya que los aumentos no impactan en sus bolsillos.

También requieren la “incorporación de ítem por dedicación especial –bonificable y remunerativo-  para directores, vicedirectores y regentes”, puesto que “las nuevas formas de trabajo nos ha llevado a dedicar más horas de las correspondientes a nuestras funciones y esto impacta en la vida personal de cada uno.

Por último, solicitan que se les reconozca la guardia pasiva, ya que “este tiempo laboral en el que debemos cotejar información del personal y validar datos a través del GEM es trabajo, que demanda además del uso de la tecnología informática,  tiempo, concentración y atención que se resta a nuestro tiempo de ocio. Por lo que hace que la guardia ya no sea pasiva sino activa”.

Líderes

Ayer, durante el acto de inicio lectivo de este año, José Thomas destacó el rol preponderante que tendrán los equipos directivos a la hora de garantizar el inicio de clases presenciales y el cumplimiento de los protocolos.

Al respecto, el director general de escuelas aseveró que “las opciones las definirá cada director en conjunto con los supervisores. Porque tenemos 1.300 edificios en toda la provincia y no tenemos la misma realidad de transporte, de cantidad de personas en las escuelas, de la realidad de los docentes. Por eso entendemos que los directores son quienes mejor conocen su realidad educativa para tener el mejor plan de acción, en consenso siempre con la comunidad”.

Al tiempo que les marcó el rumbo: “proponemos dar recomendaciones y que los directores tengan la resolución final. Para los más chicos y para los fines de ciclo, más presencialidad. Preferentemente, franja horaria completa. Distanciamiento social, barbijo y elementos de higiene es la condición necesaria. Vamos a bajar lineamientos bastante precisos pero con un margen de acción para los directores que deben liderar la comunidad educativa”.

 

En las viñas de mi tierra, tristeza y sueldos de hambre

Sin agua potable en la Mendoza elegida por Forbes