EXCLUSIVO | De acuerdo con documentación oficial y testimonios a los que accedió EL OTRO, el funcionario de la Suprema Corte de Justicia de Mendoza, Giancarlo Spinetta, realizó cuantiosas operaciones en entidades financieras de Estados Unidos, que nunca informó en su declaración jurada patrimonial. El abogado, que actualmente cobra alrededor de doscientos mil pesos mensuales por coordinar el Área de Innovaciones Judiciales, ingresó a la Justicia provincial sin rendir concurso, acomodado por su tío José Valerio, uno de los jueces oficialistas del máximo tribunal. Además, pesa sobre Spinetta una gravísima denuncia por violencia de género que, desde mediados de junio pasado, está en investigación del Ministerio Público Fiscal. Una expareja del denunciado abandonó la provincia para proteger su integridad.

Investigación especial de EL OTRO

José Valerio Foto de archivo: Coco Yañez

A fines de 2016 el juez de la Corte mendocina, José Valerio, intentó meter por la ventana a su sobrino Giancarlo Spinetta, como uno de sus colaboradores de confianza. Sin embargo la Sala Administrativa del máximo tribunal, integrada por los jueces Omar Palermo, Julio Gómez y Pedro Llorente, sopesó los turbios antecedentes del pariente y, finalmente, decidieron no darle el gusto al supremo y amigo personal de Alfredo Cornejo.

No era para menos. Tal como informó EL OTRO hace cuatro años, en 2013 Spinetta fue imputado penalmente por el delito de estafas, en carácter de partícipe necesario. Brete judicial del que pudo zafar gracias a su círculo de clase, aceitadas relaciones políticas y sociales, y una fianza de 20 mil pesos.

Sitio Andino | 5 de setiembre de 2013 Captura de pantalla

El sobrino del magistrado había sido denunciado entonces por el exintendente de Las Heras, Rubén Miranda, de participar en ventas irregulares de terrenos ubicados en El Challao, propiedad de Vialidad Provincial y de particulares.

Spinetta ocupaba desde 2010 la Subdirección de la Fiscalía de Estado, designado por su padrino y titular del organismo, Joaquín de Rosas, quien para 2012 ya había caído en desgracia. El brazo corto y lento de la Justicia no alcanzó al ahijado, pero un sumario administrativo terminó con su carrera en uno de los principales organismos de contralor de Mendoza.

 

Arriba: Spinetta (derecha), apoderado de la ONG Protectora, firma un convenio de cooperación con el entonces intendente de Godoy Cruz, Alfredo Cornejo. Fuente: ONG Protectora.

Abajo: Spinetta (derecha) junto Jorge Teves, ex concejal de la UCR de Godoy Cruz y senador provincial. Fuente: ONG Protectora.

 

El privilegiado tuvo suerte una vez más y consiguió trabajo en la Procuración del Tesoro de la Nación hasta 2015, y desde diciembre de 2016 –fecha en que Cornejo entronizó a Valerio- el tío se obstinó hasta que logró acomodarlo en el seno del tribunal supremo en un ascenso que lo llevó a la titularidad de la Coordinación del Área de Innovaciones Judiciales, con un sueldo mensual que ronda los 200 mil pesos, y bajo el ala de Dalmiro Garay, otro amigo radical de Cornejo que hoy preside la Corte.

Este diario dio información detallada sobre el caso en abril de 2017. Durante la investigación que originó la nota Los acomodados del juez Valerio, periodistas de EL OTRO accedieron a fuentes testimoniales y documentación, por entonces dispersa, que hacían sospechar que, además de prioridades de sangre, Spinetta gozaba de prosperidad económica depositada en dólares fuera del país.

Entre los documentos financieros analizados por nuestro medio cobra especial relevancia un movimiento de divisas extranjeras operado por el propio Giancarlo Spinetta y su padre. Se trata de una transferencia de 50 mil dólares estadounidenses, desde el Lloyds Private Banking a la sucursal del banco de inversiones UBS AG, ubicada en Boulevard Washignton 677 de Stamford.

Alberto Dante Spinetta y Giancarlo Spinetta, en calidad de titular y cotitular de la cuenta bancaria, autorizaron la transferencia mediante mandato online.

Captura de pantalla: Google Maps

Curiosamente la movida de capitales en Estados Unidos, cuyos orígenes desconocemos, fue resuelta en agosto de 2013, época de fuerte inestabilidad política y escándalo mediático para este abogado de la Fiscalía de Estado señalado en ese momento como estafador en la venta sin papeles de alrededor de 20 lotes, ubicados al sudeste de la rotonda de Avenida Champagnat y Regalado Olguín de Las Heras.

Luego de meses de investigación periodística, EL OTRO constató en los organismos fiscales y de la seguridad social que no hay registros de ingresos percibidos por Spinetta padre, a quien le dieron de baja en AFIP en noviembre de 2018 y actualmente no es beneficiario de prestaciones de ANSES. Asimismo, agentes locales del mercado financiero internacional confirmaron a este medio que Spinetta hijo realizó numerosas transferencias, por sí y por su padre que, en suma, rondarían una cifra millonaria que nuestro diario pudo verificar extraoficialmente, pero que no daremos a conocer –por ahora- para evitar exponer a nuestras fuentes confidenciales a la posible violación de secretos bancarios.

Secreto que también parece tener la Suprema Corte de Justicia, que en su página web oficial aún no publica la declaración jurada patrimonial del acomodado, transgrediendo así la Acordada 27381 que los jueces supremos firmaron en 2016, con el supuesto fin de “prevenir y detectar incompatibilidades, conflictos de intereses y eventuales enriquecimientos ilícitos por parte de los funcionarios públicos”.

Ingresando a este vínculo, cualquier persona podría verificar de manera actualizada cómo están integrados los patrimonios de jueces, fiscales, agentes, funcionarias y funcionarios judiciales. Sin embargo, pese a que lleva años en el Poder Judicial, la declaración jurada del coordinador Giancarlo Spinetta no está disponible. Ausencia total de transparencia que impide el control ciudadano y, específicamente en este caso, saber cuánto dinero tiene el sobrino de Valerio en el exterior, de dónde lo sacó y qué hizo para merecerlo.

Captura de pantalla

Descartando los típicos errores de carga o caídas de sistemas, está claro que las autoridades judiciales deben explicaciones acerca del porqué de semejante morosidad informativa por parte del protegido Spinetta. Bastaría con una decisión sumaria de la dama y los caballeros cortesanos para garantizar claridad republicana, un bien muy escaso en el Parque Cívico.

Como si estos antecedentes no fueran suficientes, el Ministerio Público Fiscal recibió en junio de este año una gravísima denuncia de violencia de género contra Giancarlo Spinetta. Una fuente reservada del Poder Judicial entregó a EL OTRO una copia de la Actuación N° D-50680, en la que una expareja del abogado narró haber sufrido una serie de agresiones físicas, psicológicas, económicas, tentativas de inducción al suicidio, acoso e incluso espionaje ilegal en su teléfono y computadoras. “Un infierno”, tal como lo describe en la denuncia, que la obligó a dejar Mendoza para proteger su integridad y su vida.

Giancarlo Spinetta Foto: Facebook

Este diario intentó comunicarse con la víctima, quien a través de una intermediaria ratificó los términos de la denuncia. Aseguró que se encuentra viviendo en Buenos Aires, en un estado que calificó de “estrés postraumático cronificado en el tiempo”, con dolorosas consecuencias físicas y psíquicas que son atendidas por profesionales.

“Quiero que todos sepan que si me pasa algo a mí o a mi familia el responsable es Giancarlo Spinetta y quienes lo protegen. La Justicia no está haciendo nada para investigar todo el suplicio que yo vivo, estoy aterrorizada, no doy más, mientras él sigue impune en la Corte”, señaló descarnadamente la denunciante –quien pidió reserva de su identidad- en el único mensaje de texto que envió a nuestro diario, donde se comprometió a dialogar con EL OTRO “cuando me recupere un poco de todo esto”.

 

Los acomodados del juez Valerio