Se estima que el 90% de las personas sometidas a trata en Mendoza son mujeres, niñas y adolescentes. Ante la ausencia de políticas públicas integrales que apunten contra esta problemática, cada dos días desaparece una mujer y nuestra provincia se convierte en un blanco fácil para estas redes criminales. En diálogo con EL OTRO, Cecilia Carozzo, licenciada en Trabajo Social y coordinadora del Área de Género y Mujer de la Asociación Ecuménica de Cuyo, nos comenta sobre el trabajo que desde su organización han realizado cuando conformaron la Mesa Local contra la Trata de Personas junto a otros espacios, y denuncia la nula implementación de políticas públicas para la prevención, erradicación y sanción de la trata de personas con fines de explotación sexual en la actual gestión. Por su parte, Laura Chazarreta, diputada provincial por el Frente de Todos, detalla el trabajo que realizan desde la Comisión Especial de Género y Erradicación de Trata de Personas en la Legislatura, aunque señala que no existe un compromiso real por parte del oficialismo para luchar contra este flagelo que condena fuertemente a las mujeres.

Por Milagritos Contreras
Fotos: Cristian Martínez

En el año 2012 se promulgó la Ley 26842 sobre prevención y sanción de la trata de personas y asistencia a las víctimas. Posterior a esa promulgación, en nuestra provincia se empezó a allanar el camino para cumplir con la nueva norma, y poco a poco se fue instalando la temática en la agenda local y a concientizar sobre ello. Sin embargo al cambiar la gestión, el gobierno de Alfredo Cornejo, de la mano de Mauricio Macri a nivel nacional, se encargó de desmantelar aquellos programas y organismos que durante la gestión del kirchnerismo se habían creado para minimizar la problemática. Si antes hablar de trata era algo que iba más o menos ingresando en la agenda pública, la derecha logró invisibilizarla completamente.

La licenciada en Trabajo Social y  coordinadora del Área de Género y Mujer de la FEC, Cecilia Carozzo, relata a EL OTRO sobre el trabajo que realizaron años atrás junto a otras organizaciones cuando se conformó la Mesa Local contra la Trata de Personas: “Nos empezamos a reunir en el año 2011 con distintas organizaciones y conformamos la Mesa. que funcionó hasta el año 2015, integrada por las siguiente organizaciones: Las Juanas y las Otras, Se Vienen las Mendocinas, Mujeres Pobladoras (de la Ecuménica), Mujeres en Acción, Juana Azurduy, entre otras. La Mesa era un espacio netamente de organizaciones y de referentas, mujeres que estaban interpeladas con la temática, y lo que hacíamos era vincularnos con organismos del Estado donde muy tibiamente iban saliendo a la luz en estos temas, porque estaban muy desarticulados y no conocían al respecto”.

El delito de trata de personas mueve mafias enormes, involucra complicidad por parte de jueces, políticos y policía. Y se relaciona con otro tipo de delitos como proxenetismo, venta  y tráfico de drogas, armas y lavado de dinero.

“El impacto –recuerda Cecilia- que tuvo la mesa fue, primero, apropiarnos de la temática, generar articulaciones institucionales y, al mismo tiempo, difundirla. Hicimos muchos foros, actividades educativas en escuelas secundarias, en la UNCuyo. Armamos una campaña donde nos vestimos de semáforos, nos trasladamos hacia la Plaza Independencia y de ahí a la Legislatura, y el semáforo daba las alertas de los abusos y se iba avanzando hasta llegar a una situación de explotación. Para ese momento se empezó a armar institucionalmente la Dirección de Promoción de Derechos Humanos y la Dirección de Protección de Derechos Humanos. Así se iba dando un poco más de organicidad a la temática en el marco del Estado”.

Sin embargo, Carozzo lamenta que durante el gobierno de Alfredo Cornejo se iniciara un retroceso en todo lo trabajado contra la trata de personas con fines de explotación sexual: “Pero cambia la gestión política y eso se empieza a vaciar. Después de Francisco Pérez se desarma y queda muy relegada la temática desde el radicalismo. Entonces Mendoza pierde fuerza, y tampoco aparece muchos en los medios que haya detección de casos de trata y va quedando invisibilizada. Es cierto también que el movimiento feminista va tomando fuerza en otras temáticas que emergían, como los femicidios”.

“Salvo que haya alguna situación de desaparición que las organizaciones sociales o la familia lo vinculen a un tema de trata, está totalmente olvidado a nivel local”, asegura la trabajadora social y agrega: “A nivel nacional hay un Comité Ejecutivo de lucha contra la Trata. Consideramos que se están llevando a cabo algunos pasos pero falta el impacto en cuanto a lo comunicacional. Antes había campañas más fuertes”.

Podría decirse que vivimos en una sociedad adormecida que, ante el desinterés a nivel local de instalar el tema y sensibilizar a la población, piensa a la trata de personas como algo aislado, cuando en realidad le puede pasar a tu hermana, a la vecina del barrio, a tu mamá, a tu amiga, a tu compañera.

“Está puesto el ojo en ‘qué habrá hecho ella’, la identificación de la situación de desaparición se vincula con  ‘adónde habrá estado ella o qué estará haciendo’ y no a situaciones externas que habilitan que una niña o una chica desaparezca. Lo cierto es que en el tema de trata son centrales las primeras horas. Los primeros días ante la desaparición de esa persona son muy importantes dar con las pistas y llegar al rescate. Por eso creo que la labor con las juventudes es primordial, creo que en la instancia de los secundarios, de los espacios educativos formales, es un tema para trabajarlo, como parte de la Educación Sexual Integral, como parte de otros tantos temas”, advierte Cecilia.

Carozzo menciona, además, que la base de la trata es sacarte de tu núcleo de redes, de confianza, de sostenimiento, sobre todo a mujeres que tienen alguna problemática de base, ya sea desde lo económico, desde lo educativo, o complejidades desde lo familiar: “Hay que pensar que es una destrucción generalizada de los cuerpos que son captados por la redes. No solamente tenés la carga en relación a cómo volvés a tu lugar de origen, porque en muchos casos se ha pensado que han sido prostituidas y que no ha sido por coacción sino por elección. Cómo te recuperás emocionalmente y físicamente, porque tenés muchas marcas en tu cuerpo en cuanto a lo que ha involucrado una situación de explotación tan álgida, como puede ser justamente la explotación sexual. Además de tu seguridad, porque ha ocurrido que muchas compañeras han vuelto a ser captadas por las redes de trata”.

La especialista enfatiza en que el fenómeno de este delito se va aggiornando: “Quienes están en los temas en relación a la modalidad y a la forma de desarrollo de este delito tienen que conocer qué es lo que va pasando. Porque antes era la oferta del rubro 59, eso desapareció porque se limitó, pero se convirtió en otra cosa. Virtualmente tenés círculos de pedófilos, de otro tipo de abuso sexual y demás que tienen que ver con otros mecanismos y hay que estar al tanto de cómo se van actualizando estas redes de captación. Las redes de trata se modifican en relación a la coyuntura”.

“Hay que correr el velo de este tema y ponerlo nuevamente en agenda, que se publiquen estadísticas, que se visibilice cómo se desarrolla el delito. Hay que generar redes institucionales a lo largo y ancho del país, porque en el caso de Mendoza supongamos que está más reguardada por la frontera con Chile, pero no así con el resto de las provincias, y sabemos que a una chica la pueden sacar muy rápidamente del país”, puntualizó Cecilia.

“Se trata de nosotras”

“Abordar la trata de personas con fines de explotación sexual implica ingresar al macabro terreno del ser humano como mercancía, entrar a una ‘industria’ que en muchos casos se encuentra más naturalizada que la conciencia por la integridad de las personas víctimas de este delito”, señala Cecilia Merchán, en el prólogo del libro Se Trata de Nosotras, publicado en el año 2009 por Las Juanas Editoras.

Para el presupuesto provincial de este año, el gobierno de Rodolfo Suárez destinó 38 pesos por cada mujer y diversidad. Una cifra que pareciera una broma para más de la mitad de la población, pero no lo es, es lisa y llanamente el (des)interés expresado para luchar contra las violencias que nos atraviesan a todas.

Laura Chazarreta. Foto: Seba Heras

Laura Chazarreta, diputada provincial por el Frente de Todos y secretaria dentro de Comisión Especial de Género y Erradicación de Trata de Personas, denuncia la falta de compromiso real que tiene el oficialismo en temas de género: “En esa comisión se permite, por ejemplo, intervenir en procesos judiciales de situaciones de violencia de mujeres y diversidades, trata de personas, se puede intervenir con pedidos de informes, citando a quienes tienen competencia. Por otro lado tenés todo lo relacionado a los proyectos con perspectiva de género y diversidad que han presentado legisladores y legisladoras, ya que el trabajo de esta comisión es evaluar estos proyectos e intentar darles despacho y sacarlos. Es una comisión que al ser la mayoría integrada por el oficialismo, no se lo toma como algo prioritario en el gobierno de Suarez para que se implementen políticas de género y diversidad. Por lo tanto, esa comisión va en esa línea”.

“La provincia de Mendoza –prosigue Chazarreta- no tiene políticas de género ni de diversidad, ni mucho menos políticas con respecto a la trata. Ni hablemos esto de pensar en nuestras mujeres, niñas y adolescentes desaparecidas en democracia. Sin ir más lejos, sabemos que la desaparición de Abigail, que no tiene que ver directamente con la trata, tiene una relación entre trata, prostitución y narcotráfico. Entonces, todas esas vinculaciones hacen que de repente desaparezcan principalmente nuestras adolescentes. El caso de Abigail ya se sabe que es un femicidio pero aún ella no aparece. La Provincia debió haber ofrecido una recompensa mucho más grande, en lugar de 200 mil pesos qe no es nada, porque la recompensa de un millón de pesos que hay proviene de Nación”.

Verónica Carniel, mamá de Abigail. Foto: Coco Yañez

Mujeres, niñas y adolescentes desaparecen cada dos días y el 90% son captadas por las redes de trata, siendo la mayoría destinadas a la explotación sexual. “Tengamos en cuenta que las condiciones se empeoran con la pandemia, se recicla y toman nuevas formas de explotación a través, por ejemplo, de las redes sociales. El término que se utilizaría sería el de servicio de delivery de mujeres víctimas de explotación sexual a domicilios privados. O por ejemplo la trata exprés; nuestras adolescentes principalmente desaparecen, después las buscamos por todos lados, lo difundimos en la redes, a los dos días aparecen. Sin embargo, el Estado no investiga qué pasó en esos dos días, y resulta que en muchas de esas situaciones fueron vulneradas en otro barrio donde las drogaron, las violaron, las prostituyeron y después aparecen y acá no pasó nada. Mendoza es un lugar donde surgen los proxenetas, donde se desarrolla la captación y el traslado”, argumenta la diputada provincial.

Actualmente la Ley 26842 toma como delito de trata cualquier momento del circuito: la captación, el transporte, el traslado, la acogida, la recepción, las amenazas, el adiestramiento, las violaciones, el rapto, el engaño, el abuso, la situación de vulnerabilidad en que se encuentra la víctima, todo esto es considerado delito de trata, resalta Chazarreta.

Mirta Ruiz, madre de Johana Chacón Foto: Coco Yañez

La mayoría de las mujeres que son captadas se encuentran en un estado de vulneración de otros derechos, subraya la legisladora del FdT: “Hay ciertos lugares donde hay mayor vulneración que otros como, por ejemplo, el Valle de Uco, San Rafael, Lavalle. No nos olvidemos de Johana Chacón y de Soledad Olivera, por más que no las sacaron de Mendoza, claramente también ahí jugaban estos factores del abuso, la manipulación, el engaño, las violaciones. De hecho en su momento hicimos una denuncia como posible delito de trata porque no aparecía Johana”.

“Hoy – resalta la legisladora- contamos con un Ministerio de Mujeres y Diversidades. No es casualidad que el Gobierno Nacional saliese con un plan contra la trata y explotación de personas, que está rearmándose, está pensando para 2020-2022. Esto es un trabajo entre los ministerios, el Comité Ejecutivo Contra la Trata, y diversos organismos del Estado, donde el foco es la prevención, la asistencia, la persecución y el fortalecimiento institucional. Es decir cómo garantizarles a las mujeres, adolescentes, niñas, rescatadas de las redes de trata poder rehacer sus vidas dignamente. Y para eso es necesario que el Estado genere a través de este plan el acceso a la vivienda, planes de apoyo, tratamiento psicológico y psiquiátrico, que puedan tener reparación a partir de todo lo vivido y que es imposible si el Estado no está presente”.

Foto: Cristian Martínez

“Como sociedad debemos identificar que la trata es un problema que nos involucra a todes. Es la peor de las explotaciones y violencias que sufrimos mujeres, niñas y adolescentes con fines sexuales. Si el Estado provincial no tiene políticas en contra de la trata, entonces hay un abandono. Por lo tanto es necesario que se haga cargo, sea responsable, y es fundamental exigirle para que esta problemática sea parte de las prioridades, para terminar con las desigualdades históricas que tienen que ver con las violencias y explotaciones sobre nosotras. Sobre todo teniendo en cuenta que estamos en pandemia. Insisto, el patriarcado y todas sus formas de violencia deben ser una gran preocupación del gobierno provincial para terminar con las desigualdades”, concluyó la diputada.

 

 

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