Flor Destéfanis tiene 28 años, es abogada, escribana, trabaja hace años en la gestión pública y fue Reina Nacional de la Vendimia en el año 2010. También fue la única mujer electa intendenta en Mendoza en las elecciones 2019. La referente de la renovación peronista en la provincia dialogó con EL OTRO acerca de cómo la recibe Santa Rosa, el pueblo que la eligió como su principal dirigente.

Por Jo Thomatis / Fotos: Seba Heras

Fuera del imaginario colectivo de cómo se comporta una mujer que pasó por una corona, Flor Destéfanis se presenta como una persona muy simple y directa que habla con claridad, con la convicción de que es mucho más “que una cara bonita” y de que trabajó muy duro para llegar a ser elegida intendenta por el departamento de Santa Rosa.

La flamante dirigente, pronta a asumir en su cargo, recibió a EL OTRO en la plaza principal de su pueblo para contar cómo llegó a ser quien es y a ocupar el espacio de la única mujer intendenta de Mendoza.

¿Cómo llega Flor Destéfanis a la vida política y a ser electa intendenta de Santa Rosa?

Todo esto comenzó, de alguna manera, con la experiencia del reinado, que me permitió tener un trabajo social y territorial que me inclinó a seguir haciendo política. Después y a partir de ahí he participado de distintos gobiernos y gestiones aportando desde mi lugar.

Sí fue una patriada lo que hicimos en 2016 y 2017, cuando participamos en esas elecciones a intendente, porque era una situación y un contexto político diferente al de hoy: la gente todavía no veía las consecuencias de la crisis del gobierno de Macri. Éramos todos chicos jóvenes que de repente empezamos a hacer una campaña. No ganamos pero seguimos trabajando, posicionándonos y, después del frente santarrosino que conformamos con otros espacios políticos, terminamos llegando a la intendencia en este 2019. De verdad se puede demostrar a la gente que hay otra forma de hacer política.

¿Qué opiniones le llegan de la gente respecto a su carrera política?

Me dicen que soy muy joven y me hablan siempre como reina, pero no solamente soy reina y soy joven sino que soy abogada, escribana y tengo experiencia en la gestión pública. Creo que todos empezamos alguna vez sin experiencia y si no lo hiciéramos siempre serían los mismos los que gobiernan.

Armando un buen equipo, obviamente de profesionales, de gente capacitada e idónea que es de Santa Rosa, estoy convencida de que vamos a hacer un muy buen gobierno y de parte de la gente también hay muy buenas expectativas.

¿Cómo se posiciona frente al hecho de que tanto en las noticias como en distintos ámbitos de la vida pública hablen de usted catalogándola constantemente como reina de la Vendimia?

Yo creo que el hecho de tratarme como la reina sirve para reivindicar el rol de la reina de la Vendimia. Hoy en día todos tenemos un prejuicio que no es así sobre la figura de la reina: somos mujeres, personas que seguimos capacitándonos y tenemos una vida normal. Haber sido reinas nos puede abrir puertas o no, se trata de cómo una sepa desenvolverse. Tu vida sigue más allá de que fuiste reina.

La gente piensa que ser reina es estar como una figura bonita y yo durante mi reinado nunca me quedé quieta. Una tiene responsabilidades importantes, acompañás a empresarios, bodegueros, gobernadores, a promocionar vinos, promocionar el turismo. Yo creo que ser reina me sirvió mucho y he demostrado que esa tarea no es ser solo una cara bonita y que podés hacer muchas otras cosas después de eso, como dedicarte a la política.

Sí me molesta que me encapsulen como reina cuando voy a algún lugar. Hace poco fui a Canal 7 con el intendente de Las Heras y Andrés Gabrielli me dijo “hola reina” y al intendente le dijo “hola doctor” y lo que pensé fue “yo también soy doctora”, eso pasa un montón.

El contexto social y político se ha visto profundamente marcado por la lucha feminista en el último tiempo y hoy se plantea la discusión de si es necesario seguir eligiendo una reina de la Vendimia cada año, ¿Cuál es su postura frente a esta discusión?

Es bastante complejo de tratar este tema en nuestra provincia. Es una fiesta que lleva 83 años, que está muy arraigada a la gente. Creo que no hay que eliminar la figura de la reina, pero sí creo que hay que modificar el método de elección: hoy en día las votan por una foto donde se ven bonitas.

Después hay que buscar consensos sociales, si hay una gran mayoría de los mendocinos que considera que la reina no tiene que elegirse, bueno se tendrá que ir cambiando. Hay que ir acomodándose a lo que se va dando en la actualidad.

¿Cómo experimenta el ser mujer en el mundo de la política?

No es fácil, porque la política ha sido históricamente un espacio de varones. Cuesta mucho, pero me siento cómoda. Ser mujer, reina y joven la verdad que ha sido algo distinto y revolucionario hasta dentro del partido, de la política en general.

Todavía nos falta mucha lucha a las mujeres. La Ley de Paridad es un avance, pero en los cargos ejecutivos, de 18 intendencias tenemos una ocupada por una mujer y solamente cuatro fuimos candidatas mujeres. Hay que seguir dando las luchas.

Destéfanis, del Justicialismo, será la única mujer mendocina al frente de un Ejecutivo departamental.

¿Cuál es su postura frente al debate por la legalización del aborto seguro y gratuito?

Nosotros nos hemos mantenido al margen de esa discusión porque lo que planteamos es que no tenemos injerencia desde el municipio en el tratamiento de una ley al respecto, son temas que se tratan en el Congreso. Lo que es prioritario para nosotros es que los pibes y las pibas que hoy sí están en este mundo tengan algo para comer.

Desde la gestión municipal en lo que trabajaré es en que se garantice la oferta de anticonceptivos en los centros de salud que dependen del municipio y también me parece muy importante la aplicación de la Ley de Educación Sexual Integral en las escuelas y en lo que podamos ayudar desde el municipio lo haremos.

¿Cómo recibió el peronismo su triunfo?

Hablé con Anabel Fernández Sagasti y me dijo que le había transmitido a Alberto Fernández y a Cristina Fernández que Fernando (Ubieta), de La Paz, y yo somos la renovación y ellos están muy felices con eso. Estoy segura de que Alberto será el próximo presidente y que vamos a poder trabajar mucho por Santa Rosa. También tengo muy buen diálogo con los intendentes locales del peronismo histórico y de la renovación.

¿Cómo encara el diálogo con el próximo gobernador, Rodolfo Suárez?

Esperamos tener diálogo. Por lo menos puedo decir que Rodolfo Suárez me escribió, se comunicó conmigo la semana después de las elecciones y queremos empezar a trabajar más allá de los colores políticos. A la hora de ver todo lo que podamos lograr para Santa Rosa, para la proyección del departamento, tenemos que ir a golpear la puerta de todos más allá de nuestras ideologías.

Y así como desde la provincia se comunicaron conmigo, desde la gestión local la intendenta Norma Trigo nunca se comunicó, solo nos ha atendido la gente de Hacienda, pero las autoridades no. Lo que estamos viendo permanentemente desde el Concejo Deliberante es que se acercan distintas instituciones a las que les han prometido cosas desde el municipio y a las cuales les han dicho que como ahora perdieron las elecciones las cosas son distintas, entonces esos apoyos que habían prometido a eventos sociales y culturales ya no están. Están más preocupados por cerrar cuentas o números que por gobernar.

 

Martín Aveiro, el intendente del 73%