La Justicia provincial resolvió elevar a juicio la causa contra el exfutbolista Ignacio Irañeta, por “abuso sexual gravemente ultrajante (dos hechos) en concurso real con exhibiciones obscenas agravadas por ser la víctima menor de 13 años de edad”. El acusado es defendido por Juan Day, quien fuera abogado de los genocidas Luis Miret y Guillermo Petra y del abusador sexual Alejandro Jofré.

Por Negro Nasif

Foto de archivo: Seba Heras

El 2 de enero de 2019, la madre de una niña de tres años denunció ante la Ministerio Público Fiscal que Ignacio Irañeta abusó sexualmente de la menor, en el contexto del aprovechamiento de un vínculo familiar entre el agresor y la víctima.

Durante casi un mes, el entonces jugador de fútbol del club Independiente Rivadavia de Mendoza estuvo prófugo de la Justicia, con pedido de captura nacional e internacional, hasta que finalmente fue imputado por “abuso sexual gravemente ultrajante”, aunque conservó su libertad luego de acreditar una fianza de $500.000. También mantuvo su impunidad, ya que si bien se le impusieron restricciones, entre ellas la imposibilidad de salir de la provincia, Irañeta realizó un viaje a Santiago del Estero para hacer banco en un partido, y vacacionó tres semanas en Pinamar -en la casa del empresario Agustín Vila- sin que estas graves violaciones legales hayan motivado la reconsideración de su situación judicial.

Arriba: Ignacio Irañeta de vacaciones en Pinamar junto a sus amigos, sin haber sido autorizado por la Justicia | Captura de pantalla: Instagram de Lito Andrada (2023) |

Abajo: Una de las notas del Multimedios América para intentar lavar la imagen pública del jugador de Independiente Rivadavia.

15 de mayo de 2020 | Captura de pantalla del Suplemento Ovación de Diario UNO.

Desde aquellos días, la lentitud de la (in)Justicia patriarcal sometió a un largo peregrinar a la denunciante y su hija, quienes tuvieron que soportar la revictimización procesal y una cínica campaña de medios hegemónicos de comunicación para intentar lavar la cara del imputado por “el difícil momento que le tocó vivir”.

La defensa de Irañeta, en los últimos cuatro años, se enfocó fundamentalmente en agredir y descalificar a la madre de la niña y en una sucesión de chicanas procesales para obtener un sobreseimiento, que le fue negado en dos oportunidades, y evitar la elevación a juicio que, luego de un desistimiento de apelación “por una cuestión de economía procesal”, se hará efectiva en 2024.

Foto de archivo: Seba Heras

El acusado estará en el banquillo frente a un tribunal penal que, entre otras pruebas, deberá considerar el testimonio de la víctima obtenido a través de cámara Gesell, sumado a entrevista preliminar y horas de juego que, de acuerdo con la querella, prueban “un relato claro de abuso”.

Según consta en el expediente judicial, Irañeta cuenta con el respaldo legal de Juan Day, abogado tristemente célebre por haber defendido a los genocidas y exmagistrados del terrorismo de Estado, Luis Miret y Guillermo Petra, quienes fueron condenados a prisión perpetua por delitos de lesa humanidad en 2017.

Juan Day y Alejandro Jofré Foto de archivo: Coco Yañez

Day también fue defensor del exsubsecretario de Trabajo, Alejandro Jofré, condenado en abril de este año a la pena de 2 años y 6 meses de prisión en suspenso, e inahibilitación absoluta y perpetua para ejercer cargos públicos, por ser penalmente responsable de reiterados y sistemáticos abusos sexuales contra trabajadoras que, al momento de los crímenes, se encontraban bajo su jerarquía laboral.

 

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