Los cruces internos en la agrietada alianza pro-radical sacaron a la luz la pésima gestión educativa de Cambia Mendoza. Durante los gobiernos de Cornejo y Suarez se construyeron menos escuelas que en las administraciones peronistas de Jaque y Pérez. Pese a los intentos del Ejecutivo para desmentir las cifras, la falta de infraestructura es una realidad que habla por sí misma y los datos duros lo certifican. No solo los sueldos de las maestras mendocinas son de los más bajos del país, un informe reciente del Indec también señala que Mendoza es la provincia con menor porcentaje de establecimientos educativos estatales: 66%, mientras que la media nacional es de 75%. Las estadísticas oficiales indican, además, que el freno de las obras para la educación y la creciente onda de privatización se dieron en paralelo al crecimiento de la cantidad de alumnos/as en las escuelas estatales. Sobre llovido, mojado.
INVESTIGACIÓN DE EL OTRO | Por Juan Sajor
El diputado nacional Omar De Marchi, en su nuevo rol de detractor de la alianza pro-radical de la que pretende despegarse, advirtió que en las gestiones de los gobernadores Celso Jaque y Francisco Pérez se construyeron 200 escuelas, mientras que sus exsocios Alfredo Cornejo y Rodolfo Suarez solo inauguraron 26. La denuncia fue rápidamente objetada por el Gobierno provincial y sus medios hijos de pauta, que mostraron los registros de la Subsecretaría de Infraestructura Educativa, según los cuales, entre 2008 y 2015, se construyeron 55 escuelas “desde cero” y, desde 2015 a 2022, 30 nuevos establecimientos.
Más allá de la interna partidaria y de la diferencia de criterios sobre el tipo de obras por las que se mide la gestión, es indiscutible que la inversión en infraestructura escolar cayó significativamente en los últimos años. Al menos así lo demuestran las cifras del Anuario Estadístico 2021 que el Indec (Instituto Nacional de Estadísticas y Censos) publicó recientemente. De acuerdo con este informe, que es elaborado con datos oficiales de las direcciones provinciales de estadísticas -entre ellas la DEIE mendocina- y de las organizaciones públicas y privadas que conforman el SEN (Sistema Estadístico Nacional), Mendoza es la provincia con menor porcentaje de establecimientos educativos estatales.
En el apartado Educación del Anuario, el cuadro Distribución porcentual de establecimientos y alumnos de educación común, por sector de gestión, según jurisdicción de 2020 y 2021 ubica a nuestra provincia en el fondo de la tabla, solo superada en su descenso por la Ciudad de Buenos Aires que, recordemos, no es una provincia sino un territorio autónomo, de acuerdo a la Constitución Nacional reformada en 1994.
Según estos números oficiales, en 2021 Mendoza registró 1.756 establecimientos, de los cuales el 66,6% son de gestión estatal y el 33,4% de administración privada. En contraste, el promedio nacional de establecimientos estatales por jurisdicción es de 75,4%. La tabla muesta sistemas públicos más robustos en provincias como Córdoba (76,1%), Santa Fe (72,3%) y ni hablar de las de la región: San Juan (81,7%), San Luis (88,1%) y La Rioja (93,4%).
El deterioro de la infraestructura se advierte con mayor claridad si se comparan las estadísticas de 2021 con la década anterior. En 2011, de acuerdo al Anuario Indec 2012, el cuadro de distribución porcentual de establecimientos devela que, de las 1.608 escuelas registradas en Mendoza, el 77% pertenecía a la gestión estatal. Once puntos porcentuales más que en la actualidad.
Del balance de las cifras surge también que el crecimiento del número de establecimientos de gestión privada no significó una descompresión de la educación administrada por el Estado. Si bien la cantidad de escuelas del sector privado pasó de 486 (en 2015) a 587 (en 2021), la cantidad de alumnos en este ámbito bajó de 23,4% a 21,9%. Por ende, la matrícula de las escuelas públicas tuvo la evolución contraria, sobrecargándose el sistema estatal.
En 2021, las 1.169 escuelas estatales de Mendoza brindaron educación al 78% del total de estudiantes, es decir, 400.922 alumnos y alumnas. De este dato se desprende que por establecimiento se contaron 343 educandos. Comparándolo con escuelas de provincias de Cuyo y otros puntos del país, el número es alto. En cantidad de alumnos por establecimiento, San Luis, por ejemplo, reporta 253, San Juan 251 y Córdoba 192.
Este nivel de retroceso del sistema educativo mendocino se puede evaluar desde distintas perspectivas. Una de ellas surge del cotejo de la cantidad de establecimientos escolares, de gestión estatal o privada, con relación a la cantidad de habitantes y su comparación con otras provincias. De ese cruce de datos podemos señalar que el conglomerado más grande de Cuyo tiene un establecimiento escolar cada 990 habitantes, lejos de Córdoba que garantiza una escuela cada 785 personas. No se está mejor parado en la región: San Juan posee un establecimiento cada 836 habitantes y San Luis uno cada 856. En tanto que en La Pampa hay 830 alumnos por escuela y en Formosa 615.
El desfinanciamiento de la educación y la transferencia de recursos del sector público al privado es un sello de las administraciones de Cornejo y de Suarez. Recortes salariales que sepultaron lo sueldos de los docentes al último piso de la escala nacional, falta de mantenimiento de los edificios escolares, recortes del presupuesto para la construcción de nuevas escuelas, cierre de la modalidad de Gestión Social, clausura definitiva de jardines maternales, son escenas que se repiten constantemente en la larga película del abandono de la educación en Mendoza.
De cara a las elecciones, ni las usinas propias pueden camuflar la falta de capacidad de la segunda gestión del Frente Cambia Mendoza y el consecuente descontento social. La consultora Reale Dalla Torre, habitual encuestadora del radicalismo, expresó en su último trabajo de investigación que, de las tres principales preocupaciones de las y los mendocinos, dos dependen de la gestión provincial. En número concretos: la inflación, determinada por la macroeconomía nacional, le preocupa al 90%; le siguen la inseguridad (49%) y la educación (40,1%), materias pendientes de la Mendocita.
