La subdirectora de Turismo de Rivadavia, Claudia Jaunin, publicó en sus redes sociales una reivindicación del genocidio. Mientras los medios pautados calificaron como “polémica” a la apología de los crímenes de lesa humanidad, las autoridades del radicalismo mendocino hicieron completo silencio. Nuevamente la incitación al odio contra referentes del peronismo expresa el “deseo” antidemocrático de la supresión del otro.
Por Negro Nasif
Este domingo Claudia Jaunin, militante radical y actual subdirectora de Turismo de Rivadavia, posteó en su perfil de Facebook un fotomontaje con una clara y directa reivindicación de los métodos sistemáticos de desaparición de personas ejecutados por la última dictadura cívico militar. La funcionaria utilizó un montaje que representa al dictador Jorge Videla secuestrando, en un Falcon verde, a la vicepresidenta Cristina Fernández, al gobernador de Buenos Aires Axel Kicillof, al presidente de la Cámara de Diputados Sergio Massa, y al presidente Alberto Fernández.
“Un solo deseo quiero”, fueron las palabras que acompañaron a la imagen de apología del genocidio, que fue calificada como “polémica” por los medios oficialistas mendocinos. Aunque no hay absolutamente nada que controvertir, discutir, ni polemizar con quienes reivindican los peores crímenes de la humanidad, diario Los Andes tituló “Polémica en Rivadavia”, MDZ se refirió a “la polémica publicación de una funcionaria municipal”, en tanto que Mendoza Post señaló que la funcionaria “hizo un posteo polémico”, y El Sol habló del “posteo polémico de Claudia Jaunin”.
Pese a la amplia transcendencia que la atroz publicación de Jaunin tuvo en medios provinciales y portales de transcendencia nacional, entre ellas la agencia oficial Télam, las autoridades de la alianza Cambia Mendoza guardaron completo silencio.
Con expresiones en potencial, Hernán Amat, presidente del Concejo Deliberante de Rivadavia, manifestó en entrevista con MDZ que “jamás avalaría o justificaría cualquier hecho o dicho que ponga en valor la Dictadura Militar y todo el terrorismo de Estado sucedido en la época más terrorífica y nefasta de la Argentina”.
“Me sorprende lo sucedido, conozco a Claudia y sé de su militancia por Alfonsín y los ideales radicales, seguramente pedirá disculpas y ya se ha dado cuenta de este gravísimo error. No coincido en nada con el gobierno cristinista-k, creo que son lo peor que le ha pasado a la Nación en democracia, pero para eso están los poderes correspondientes quienes deben juzgarlo, en cuanto a la corrupción de estado el Poder Judicial y en cuanto al poder de turno, el pueblo deberá sacarlos con el voto popular”, relativizó Amat.
Por su parte Miguel Ronco, intendente de Rivadavia, comunicó que hoy se reunirá con la funcionaria de su gabinete para tomar una decisión.
La supresión del enemigo
La apología de delitos de lesa humanidad, sumada a la ausencia de repudios claros y contundentes de las autoridades del Estado provincial y referentes institucionales, se dan en un contexto de aliento de discursos de odio que, por un lado, intentar construir la imagen de un enemigo político -encarnado en el peronismo- y, por el otro, la habilitación del “deseo” -tal como lo expresó sin eufemismos Jaunin- de su eliminación simbólica y física.
En los últimos años, EL OTRO viene advirtiendo sobre este peligroso y antidemocrático fenómeno con una serie de artículos, algunos de los cuales compartimos a continuación:
